Castillo de Sarracín (Vega de Valcarce)

A)  Ubicación geográfica:

      Vega de Valcarce se sitúa en el extremo occidental de la provincia de León, dentro de la comarca de El Bierzo, siendo uno de los municipios leoneses fronterizos con Galicia. Por el municipio atraviesa el Camino de Santiago, hecho por el cual Vega de Valcarce cuenta con dos albergues de peregrinos. Se sitúa a 143 kilómetros de la capital provincial. El término municipal está atravesado por la Autovía del Noroeste entre los pK 418 y 430, así como por la carretera nacional N-6, siendo el último municipio de la provincia de León que atraviesan antes de entrar en Galicia.

 El relieve del municipio es predominantemente montañoso, entre cuyas cumbres discurren numerosos arroyos tributarios del río Valcarce, que se forma por la confluencia de arroyos que nacen en las cercanías del puerto de Piedrafita (1112 m), que hace de límite entre León y Lugo. La altitud del municipio oscila entre los 1598 metros (Alto de Capelo), al suroeste, y los 580 metros, en la ribera del río Valcarce. El pueblo se alza a 750 metros sobre el nivel del mar.

B) Características:

      Actualmente el colegio de Vega de Valcarce consta de una unidad de Educación Infantil y dos unidades de Educación Primaria.

       Los alumnos que proceden de otros pueblos disponen de  servicio de transporte para acceder al colegio. Así mismo, también reciben el servicio de comedor.

C) Medio cultural:

       Estos municipios basan su economía principalmente en actividades de agricultura y ganadería. También existe un pequeño sector dedicado al turismo atraído por el Camino de Santiago.  En general, se trata de una zona tranquila, con un alto valor ecológico debido a su situación geográfica. Sus habitantes pueden disfrutar de una calidad de vida envidiable.

       Los niveles de acceso a la cultura y a la información de estos alumnos  se pueden igualar a los alumnos de cualquier zona urbana, ya que las nuevas tecnologías hacen posible el acceso a la información y  la cultura disfrutando además de las ventajas que tiene vivir en un paraje natural. 

      Muchos de los alumnos matriculados en el Centro, residen en pueblos muy pequeños, con un porcentaje de  población escasa y en la que muchas veces los únicos niños que hay son ellos. Así pues, la oportunidad que tienen de relacionarse con sus iguales y con otras personas en el colegio es muy importante y positiva para ellos.